Ciudad Juárez: Sobrevivir en la violencia
Palabras clave:
Violencia, frontera, desplazamiento, feminicidios, crimen organizado, inseguridadResumen
Pocas historias recientes son equiparables a la de Ciudad Juárez. Es difícil encontrar una población que, como la juarense, enfrente condiciones tan adversas. Tal parece que en esa ciudad fronteriza se amalgaman todas las calamidades de nuestra vida pública: gobiernos erráticos y huérfanos de políticas públicas acordes con las necesidades más urgentes de la población; estructuras económicas y productivas atentas únicamente al beneficio de los grandes capitales; reducción drástica de la oferta de empleo, aunada a la creciente precarización salarial y laboral; un complejo fenómeno demográfico en el cual se suman el interés por migrar hacia Estados Unidos y los desplazamientos de nutridos contingentes que van del sur al norte de nuestro país, y de las zonas rurales hacia las principales ciudades de la frontera; el deterioro acumulado ya durante varios lustros de la infraestructura urbana y de los espacios públicos propicios para la convivencia cotidiana; la especulación del suelo urbano y la escasísima inversión pública en servicios de salud, recreación, cultura y deporte. Este catálogo de desventuras se agrava si añadimos el dato más crudo en la vida juarense: la incontenible difusión de la violencia, sintetizada en los cientos de feminicidios cometidos desde los años noventa –y que continúan hasta nuestros días– y en los miles de asesinatos que desde 2007 asolan la vida de esa ciudad, todo ello en el marco de una amplia disputa entre bandas del crimen organizado y de las acciones policiacas y militares emprendidas en el último trienio por los gobiernos locales y federal.