No. 188 Reformas del campo: asignatura pendiente
Breves reflexiones sobre el campo mexicano con una vuelta rápida a algunas del tan vituperado marxismo)
Julio Moguel
He rechazado, para la confección de este artículo, la vía de integrar informaciones específicas detalladas sobre el campo mexicano. Quiero, si se me permite, utilizar un tono de menor formalidad académica que el habitual, regresando para ello a algunas ideas caras al marxismo. Adelanto, desde la referida conceptualización y desde una aproximación indiciaria, una definida conclusión: en las políticas públicas que ahora se dirigen hacia el campo mexicano existe un claro propósito de “cambiar el estado de las cosas” de una forma más o menos radical, jugándose en ello la intención de fundar un nuevo Estado, ajeno a todo nacionalismo y a importantes valores con los que se conformaba aún hasta hace poco nuestra “esencia e identidad”, con la audacia pretendida de generar un nuevo bloque hegemónico encabezado por lo que pudiéramos llamar políticos neoliberales de nueva generación. El peñanietismo (¿ya podemos llamarlo de esa forma?) es la marca de fábrica más conocida de dicho emprendimiento. Veremos.
Fortalecimiento del Marco Jurídico Institucional Agrario
Cruz López Aguilar
En el marco del Copecose, como sector agrario, nos atrevimos a formular y abordar un índice más allá de los temas que incorpora el sector agrario, de la propia Procuraduría Agraria, como son la soberanía y seguridad alimentarias, desarrollo rural sustentable, de financiamiento y crédito para el campo, de comercialización y desarrollo de mercados, entre otros, convencidos de la capacidad de las propias organizaciones campesinas para abordarlos, pero sobre todo con la convicción de que una reforma que no es integral no es reforma.
El desarrollo social rural en México. Perspectivas desde la antropología y la historia
Martha Beatriz Cahuich Campos
El desarrollo social rural en México. Perspectivas desde la antropología y la historia. En este texto se compartirán algunas reflexiones que tanto la antropología como la historia han mostrado sobre la experiencia generada a raíz de esta “etapa modernizadora” en un afán por aportar algunos elementos que pueden servir a las presentes comisiones legislativas convocantes a este espacio. Cuando en este Foro nos preguntamos sobre cómo construir una política de desarrollo social que ayude a modernizar y transformar al mundo rural mexicano, que garantice la calidad de vida de sus habitantes, que gocen de una adecuada seguridad social, o bien cómo evitar que tengan hambre, debemos ser conscientes de que nos estamos colocando en el centro de la contradicción de la Modernidad.
Algunas reflexiones e ideas sobre el papel de la Hacienda Pública y el presupuesto público en la reforma para transformar el campo mexicano
Jorge Chávez Presa
Es importante que el sistema de planeación baje sus pretensiones en dos sentidos: uno, que deje de tener la tentación de reinventar al país cada seis años, y el segundo, que se concentre en las obligaciones y capacidades de la administración púbica federal y su coordinación con la de los órdenes estatal y municipal. Es también recomendable que la planeación gubernamental sea estratégica y eficaz, y para ello es fundamental recuperar que el pnd y los programas sectoriales vuelvan a estar alineados con el presupuesto de egresos de la federación. Hace ya casi tres lustros que el presupuesto de egresos no se vincula con los objetivos, las estrategias y las líneas de acción.
Maíz, soberanía alimentaria, autonomía y el Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP). Reformas estructurales, embates integrados
Ramón Vera Herrera
El capítulo México del TPP identificó el libre comercio como centro de una dinámica sistémica que sojuzga al derecho ante los intereses económicos de sectores ajenos a la población en su conjunto, por lo que toda la sesión del TPP (2011-2014) fue identificada como Libre Comercio, Violencia, Impunidad y Derechos de los Pueblos en México. El proceso del TPP en México abrió en octubre de 2011 siete procesos concomitantes: la violencia de la guerra sucia desatada por el gobierno con el pretexto de la guerra contra la delincuencia con su cauda de asesinatos y desapariciones; la violencia contra los migrantes y aquélla que impulsa a la gente a migrar; la violencia contra los trabajadores y sus organizaciones gremiales por las reformas que precarizan sus demandas y por la represión desatada contra la crítica y la disidencia; la violencia nacional que conocemos como devastación ambiental; la violencia de género y los crímenes discriminatorios de odio contra grupos particulares de la población, que es urgente detener de una vez por todas; la violencia contra los comunicadores y la urgencia de una efectiva libertad de expresión; y la violencia contra la vida campesina y los ámbitos territoriales de los pueblos indígenas, que es el asunto que nos ocupa centralmente en este documento.