No. 105 Nuevo gobierno ¿nuevo proyecto nacional?
Foxilandia y los jóvenes invisibles
Alfredo Nateras Domínguez
Los jóvenes regularmente adquieren visibilidad para las instancias del gobierno cuando se trata de justificar los presupuestos. Y con respecto a los partidos políticos, fungen como un valioso capital electoral. Pero una vez gastados los dineros y pasadas las votaciones, como ritualmente ocurre, los jóvenes se vuelven invisibles y son enviados a las tinieblas de las burocracias institucionales y partidistas porque se carece de una política social dirigida a ellos que los beneficie con respecto a los avatares de su vida diaria. Y todo indica que una gran parte de jóvenes, tanto hombres como mujeres, votaron en las elecciones presidenciales del ya mítico 2 de julio, no por el PAN y la ideología derechista, aunque sean conservadores, sino por la atractiva idea mercadotécnica del cambio aunado a su cansancio de un partido de Estado (el PRI), y un país en el que al parecer no pasaba nada. Fox y sus amigos llegaron al poder presidencial y hay incertidumbre, temor y ambigüedad, con respecto a lo que va a acontecer, especialmente con todos aquellos jóvenes, hombres y mujeres –la mayoría– que no cumplen o están alejados de la imagen juvenil construida del tipo: “totalmente palacio” y empresarial. Justamente, de esto y otras cuestiones, trata el presente trabajo.